¡Que el brillo sea todo tuyo!
El mundo no es un gran lugar cuando la gente «aplasta el éxito de los demás» para alcanzar su propio éxito. De lo contrario te queremos hablar hoy con la frase de impacto «Que el brillo sea todo tuyo».
Lo mejor de los equipos, son las personas y sus diferencias, capaces de multiplicar el éxito a todo nivel, siempre y cuando se entienda que los equipos se unen con restos distintos.
Lo coherente en las organizaciones, pasa por promover, destacar y comunicar quién brindó qué aporte de éxito al equipo. En eso consiste un liderazgo que practica el respecto, la coherencia y se enfoca en lo positivo.
¡Que el brillo sea todo tuyo!
1. Cómo lidear con un ambiente con bajos niveles de reconocimiento.
2. Ética y responsabilidad: una mezcla poderosa.
3. Brillar por cuenta propia es el camino más exitoso.
4. Hablemos de un liderazgo brillante
Esperamos que esta frase de impacto, te ayude a crear nuevas competencias, capacidades, reflexionar y tomar acción ante la importancia de gestionar nuestro brillo personal, desde dentro, sin necesidad de aplastar a los demás.
1. Cómo lidear con un ambiente con bajos niveles de reconocimiento.
Somos seres humanos emocionales y el reconocimiento, nos cae como la cereza del pastel a muchos, a pesar de que a otros, no nos interesa en lo absoluto, pues nos bastará con la certeza de saber qué hicimos y por qué lo hicimos, al obtener éxito en algo.
Aún así, es importante para todos, crear espacios donde el reconocimiento fluya, por el solo hecho de apelar a la verdad, respecto de quién fue responsable de un aporte, o quien o quiénes contribuyeron al éxito del equipo.
Los entornos donde el reconocimiento es inexistente, no tienen futuro.
Según la gravedad del asunto, y considerando que no podemos huir de todos los ambientes donde la ausencia de reconocimiento se instale, estas son algunas ideas para reflexionar guiándote de la frase de hoy: «Que el brillo sea todo tuyo!
· No formes parte del problema, únete a la solución.
· Enfrenta la causa de la injusticia laboral.
· No vas a crecer ni desarrollarte en un ambiente que no esté dispuesto a la autorregulación.
· Busca espacios donde se respete el talento, la creatividad y a la persona que produce ideas.
· Exige que el liderazgo sea coherente y honesto.
2. Ética y responsabilidad: una mezcla poderosa.
La ética tiene que ver con las decisiones y actuaciones relacionadas con hacer el bien a las personas, más allá de los intereses personales, construyendo juntos un bien común, alcanzable y realista.
La responsabilidad es un valor humano que promueve asumir la vinculación de nuestra persona, con las acciones, hechos y consecuencias de nuestros actos, en un escenario honesto, coherente y respetuoso.
Cuando brillas por tus logros en un espacio donde la ética y la responsabilidad conviven y construyen, es porque estás formando parte de una organización inteligente.
3. Brillar por cuenta propia, es el camino más exitoso
Cuando tomamos la decisión de escribir acerca de la frase «Que el brillo sea todo tuyo» pensamos en primer lugar, en el camino emprendedor, o en de un empleado y todo el esfuerzo que ambos perfiles, realizan en el mundo de los negocios.
Un camino individual, muchas veces solitario, eventualmente acompañado por consejos, pautas, aprendizajes y lecturas, que no es fácil ni difícil, que tiene ejemplos gratificantes qué seguir, pero que sin duda, termina, si así lo queremos, en un espacio exitoso.
Brillar por cuenta propia, sin apelar a dañar ni un ápice de la honra de los demás, es un camino que refleja éxito, porque éxito es ser independiente y alcanzar por cuenta propia todos tus sueños.
¡Que el brillo sea todo tuyo! – El Liderazgo brillante promueve organizaciones altamente competitivas
4. Hablemos de un liderazgo brillante
Un liderazgo brillante, es el que practica con orgullo, el impulso y desarrollo de los demás. Sabe, que el éxito no es ególatra, que tampoco está basado en el miedo.
Está atento al estado de cada uno de los integrantes del equipo que apoya día a día, porque sabe que para que una organización brille, se requiere de cada una de las inteligencias, en cada una de las diferencias.
Brillar con luz propia, exige en el líder, pensar primero en la luz de los demás. Y cuando lo hace, busca aportar más fuego a ese camino individual, de modo que, sea la base para la integración por pasión, de cada uno de los que suman y quieren correr, junto al liderazgo brillante.
Cuando todo esto sucede, «¡Que el brillo sea todo tuyo!» se entiende y se practica, con mayor claridad.