Afirma presidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez ante Comisión Permanente del Congreso.
La presidenta del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez, afirmó que desde el Poder Ejecutivo siempre se impulsó el diálogo con los trabajadores y los representantes del sector agroindustrial.
Durante su presentación ante la Comisión Permanente, donde interviene de manera virtual junto al ministro del Interior, José Elice, para responder sobre el paro agrario, refirió que la norma aprobada por el Parlamento no satisfizo a ninguna de las dos partes, tanto trabajadores como empresarios.
"En el desarrollo de la propuesta normativa, desde el Ejecutivo hemos impulsado el diálogo o la búsqueda del diálogo permanente con los trabajadores en ambos lugares y con representantes del sector agroindustrial, de la misma forma como lo hizo el Congreso de la República", refirió.
Respecto a la Ley del régimen laboral agrario y de incentivos para el sector agrario y riego, agroexportador y agroindustrial, aprobada por el pleno el 29 de diciembre y oficializada el 31 de diciembre del año pasado, indicó que esta norma no logró satisfacer plenamente a ambas partes.
"Pero no podemos dejar de reconocer que la norma trató de encontrar un punto medio entre expectativas de los trabajadores como de los empresarios del sector agroindustrial", agregó.
Bermúdez recordó que el 30 de noviembre del año pasado, el país amaneció con la noticia que trabajadores del sector agroindustrial de Ica había tomado como medida de protesta la toma de la carretera Panamericana, exigiendo un aumento de su remuneración y la derogatoria de un decreto supremo que ampliaba la Ley de promoción agraria.
Dijo que con dicha norma, se impulsó el crecimiento del sector logrando que nuevas y modernas empresas agroindustriales posicionaran productos peruanos en mercados globales, logrando que en entre el 2000 y 2019, las exportaciones crecieran a una tasa de 13% anual.
Exportaciones
Asimismo, señaló que el número de países a donde iban las exportaciones de productos peruanos pasó de 98 a 160, aumentando también de 82 a 205 las variedades de esta producción, logrando que el país se ubique entre los 10 que exporta alimentos en el mundo.
"Este crecimiento fue evaluado por diversos especialistas como poco distributivo, pues, si bien se crearon miles de puestos de trabajo, también hubo limitación de los derechos laborales en comparación con otros trabajadores formales", sostuvo.
Además, explicó que en este periodo se observó también un explosivo crecimiento de mano de obra trabajadora tanto permanente como otra que no lo era, este rápido crecimiento se entendería por la débil fiscalización laboral y la proliferación de "services" que eludían diversos derechos laborales.
