Las medidas para afrontar el covid-19 se enfocarán en fortalecer el servicio de salud, apoyar a los segmentos más vulnerables de familias y empresas e impulsar la inversión pública, contexto en el cual el gasto no financiero del Gobierno General aumentará en 2.2% real en el 2021 y se ubicará en 22.9% del PBI, refirió el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Precisó que, para los siguientes años, en la medida en que se vaya controlando los efectos de la pandemia, uno de los principales retos que compartirán el Perú y el resto del mundo será el de iniciar un proceso de consolidación fiscal gradual de las finanzas públicas con el objetivo de preservar la sostenibilidad de las cuentas fiscales, que ha sido uno de los principales activos del país desde hace más de dos décadas.
Así, se propone una senda de déficit fiscal que converja a un déficit fiscal de 1% en el 2026. De esa manera, el Perú continuará un proceso de reducción progresiva de la deuda pública, manteniendo las fortalezas fiscales y macroeconómicas de la economía.