El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Eduardo Arana Ysa, supervisó ayer el penal de máxima seguridad Ancón I para constatar las acciones de seguridad implementadas por el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe) y para garantizar la reinserción de los internos en la sociedad.

Por eso, en aras de mantener un trabajo conjunto entre el Ejecutivo y el Legislativo, el titular del Minjusdh se reunió con el congresista Alfredo Azurin para coordinar acciones en pro de la resocialización de los internos, así como plantear soluciones a los problemas carcelarios.

Talleres

Durante su recorrido por el Establecimiento Penitencio Ancón I, que alberga a 2,087 internos, ambas autoridades supervisaron el Cetpro-Ceba y el área de alfabetización, cuya fin es acabar con el analfabetismo para que los internos sigan estudios primarios y secundarios, así como una formación técnica certificada que les permita tener mejores oportunidades al salir del penal.

Asimismo, el ministro Arana visitó el taller de joyería, donde asumen trabajo artesanal con plata de alta calidad. También supervisó los talleres de zapatería, textil, confecciones, carpintería y cornoplastía, en el que trabajan con cacho y hueso de res.

Por su parte, acompañado por el presidente del Inpe, Javier Llaque Moya, el titular del Minjusdh verificó el funcionamiento del control biométrico, escáneres y rayos X para evitar que se vulneren las medidas de seguridad a la entrada y salida del penal, evitando el ingreso de productos ilegales.

Por otro lado, el ministro visitó la Unidad de Flagrancia del distrito judicial San Martín de Porres para inspeccionar la labor de la defensa pública y seguir articulando esfuerzos con autoridades de Lima Norte para enfrentar la delincuencia.