"Es un orgullo para mí, darle un momento de felicidad a mi país", sostuvo hoy el tenista peruano Juan Pablo Varillas (94º) al sentenciar su tercer triunfo en Roland Garros, el tercero de su carrera en un Grand Slam, y pasar a la cuarta ronda tras vencer por 3-6, 6-3, 7-6 (3), 4-6 y 6-2 al polaco Hubert Hurkacz (14º).
"Tremendo. Me pone muy feliz por mi país y por toda la gente que me esta siguiendo", declaró a Espn al confesar que vivió un ambiente mágico que lo disfrutó mucho.
Precisó que el apoyo de la hinchada nacional lo impulsó a dar todo en la cancha y al final llevarse el complicado e intenso encuentro.
"Hurkacz saca muy fuerte pero traté de hacerlo jugar todo el tiempo; lo cansé físicamente y quizás mentalmente; traté de jugar puntos largos y al último cuando tuve chances, las aproveché y gané bastante bien".
Varillas, de 27 años, logró así mantener su ilusión y la de sus padres, que viajaron por primera vez a Europa para verle, y junto a los que lloró de alegría al pasar a la tercera ronda.
Los simpatizantes de Perú ven a Juan Pablo Varillas jugando contra Hubert Hurkacz.
Al ser consultado por el desgaste físico, reconoció que está cansado, pero nada extremo. "La verdad que me siento bien. He entrenado todo el año para este tipo de momento. Estoy feliz de estar en una cuarta ronda", expresó muy emocionado.
Con esta victoria, el peruano pone punto y seguido a su mejor actuación en un Grand Slam, y se enfrentará en la siguiente fase al serbio Novak Djokovic (3º).
