Wendy Muñoz (16) lleva anotados 4 goles en el octogonal de fútbol femenino de los Juegos Escolares Deportivos y Paradeportivos y apunta a jugar en Alianza Lima.
Los resultados hablan por ella y sus anotaciones hacen honor al apelativo de "gol akai" que en la lengua shipibo-conibo significa goleadora. Y es que con los cuatro tantos logrados, Wendy Muñoz Rodríguez, destaca en el torneo octogonal de fútbol femenino de pueblos originarios de los Juegos Escolares Deportivos y Paradeportivos 2022, que organiza el Ministerio de Educación.
Wendy tiene 16 años, vive en la comunidad shipibo-conibo San Francisco, en Ucayali, donde cursa el cuarto de secundaria y es la capitana del equipo de fútbol de su colegio. Con su juego y visión goleadora, el lunes abrió el camino para la primera victoria de su equipo con dos tantos de muy buena factura.
Su equipo y el de las estudiantes de Puno, hablantes del aimara, abrieron los fuegos del octogonal, alentados por sus barras en sus respectivas lenguas originarias. Al final, se impuso el once de la goleadora shipibo-conibo por 3-0.
En la segunda fecha, el equipo shipibo-conibo mostró toda su habilidad y contundencia y avasalló al once ashaninka, al que goleó 5-0 con dos anotaciones de Wendy. Hoy, le tocó enfrentar al equipo chanca, pero las fuerzas estuvieron parejas y el partido terminó sin que se abriera el marcador.
Lleva la 10
Wendy es la segunda de cuatro hermanos y cuenta que en su pueblo todos practican el fútbol, sin distinción de sexo. Ella, que lleva la 10 en la espalda, es además capitana del equipo de fútbol de su comunidad y recuerda con orgullo que hace unos meses participó en la Copa Perú, en Pucallpa, donde anotó 15 goles en cinco partidos.
"El fútbol es un deporte muy sano y es bueno para nuestro cuerpo y nuestro desarrollo integral", sostiene la adolescente, que además destaca por ser muy buena estudiante, lo que la ha posicionado en el segundo lugar en su clase.
Wendy aspira a convertirse en ingeniera civil o arquitecta, pero su mayor ilusión es jugar en la selección peruana y en Alianza Lima, de cuyo equipo es hincha.
Ella estuvo en Lima cuando era pequeña, pero no recordaba nada de esa estancia. Ahora ha vuelto como goleadora y está maravillada con la grandeza del mar, cuando el bus que las trasladaba hasta el colegio Bartolomé Herrera para un encuentro, pasó por la Costa Verde.
Y sobre el verde del campo, esta semana tendrá muchas experiencias nuevas. Sabe que tendrá que esforzarse al máximo para llevar el título a su pueblo querido, y así se lo ha prometido a su familia, compañeros y amigos.
