El Gobierno de Estados Unidos prometió este domingo aplicar las "consecuencias apropiadas" por la muerte del periodista de ese país Brent Renaud, quien, según la policía de Kiev, fue abatido por fuerzas rusas en la localidad ucraniana de Irpin.
Washington, Nueva York, 13 mar (Agencia EFE)
En una entrevista televisada con el canal CBS, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo que lo ocurrido es "chocante y horroroso" y aseguró estar en contacto con las autoridades ucranianas para lograr más información al respecto que permita al Gobierno estadounidense tomar las "consecuencias apropiadas".
"Los rusos han disparado contra civiles, contra hospitales, contra lugares de culto y contra periodistas", lamentó Sullivan.
La muerte de Renaud, de 51 años, fue confirmada inicialmente por la Policía de Kiev, quien culpó a las fuerzas rusas del suceso.
En un primer momento, se divulgó que era periodista de The New York Times, lo que posteriormente fue desmentido por dicho diario, con el que Renaud sí había colaborado, pero hace algunos años.
El Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, sus siglas en inglés) afirmó que el ataque contra Renaud en Ucrania supone una violación de la ley internacional.
"Estamos impactados y tristes por la muerte del periodista estadounidense Brent Renaud en Ucrania. Este tipo de ataques son completamente inaceptables, y son una violación de la ley internacional", dijo en un comunicado el director de programa del CPJ, Carlos Martínez de la Serna.
"Las fuerzas rusas en Ucrania deben poner fin a toda la violencia contra los periodistas y otros civiles inmediatamente, y quienquiera que haya matado a Renaud deben rendir cuentas", agregó el representante de la organización.
Poco después del fallecimiento del camarógrafo, la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) pidió una investigación para esclarecer las causas.
Según su página web personal, Renaud trabajaba frecuentemente con su hermano en la producción de documentales y programas de televisión y había recibido un premio Peabody por su trabajo.
La web apunta asimismo que el estadounidense ya había trabajado en otros conflictos, entre ellos Irak, Afganistán o Libia.