El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró que ha enviado una carta al ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en la que le invita a seguir con el diálogo para resolver la crisis por la concentración militar de Moscú en torno a Ucrania.
Bruselas, Bélgica
AFP
“He enviado una carta al ministro de Exteriores Lavrov en la que reitero mi invitación a Rusia para seguir con nuestro diálogo en una serie de reuniones del Consejo OTAN-Rusia [foro de encuentro entre las dos partes] para encontrar una forma diplomática de avanzar”, declaró Stoltenberg junto al primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson.
Unión Europea
De forma simultánea, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, anunció que él también había respondido “en nombre de los Estados miembros de la UE” a las cartas que les remitió individualmente Lavrov para que se posicionaran por separado sobre la crisis en Ucrania
El político noruego advirtió, por su parte, de que el actual es un momento “peligroso” para la seguridad europea y señaló que el número de fuerzas rusas alrededor de Ucrania “está aumentando” y el tiempo de aviso de un posible ataque “se está reduciendo”.
“La OTAN no es una amenaza para Rusia, pero debemos estar preparados para lo peor, al tiempo que seguimos fuertemente comprometidos con encontrar una solución política”, subrayó.
Afirmó que la Alianza está “preparada para escuchar las preocupaciones de Rusia y para debatir modos de defender y fortalecer los principios fundamentales de la seguridad europea que todos hemos suscrito”.
Encuentro sin avances
Las conversaciones entre el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, y su homóloga británica, Liz Truss, en Moscú acabaron convirtiéndose en un “diálogo de sordos”, sin que las partes lograran acercar posturas con respecto a la escalada de la tensión en torno a Ucrania.
“Parece que nos oímos, pero no nos escuchamos”, dijo el jefe de la diplomacia rusa tras reunirse con Truss en alusión a las diferencias entre las partes, que quedaron patentes también en el curso de la conferencia de prensa conjunta.
Lavrov y Truss se reunieron durante cerca de dos horas en lo que ha sido la primera visita a Rusia desde el 2017 de un ministro de Exteriores del Reino Unido. Las declaraciones de ambos ministros y el lenguaje no verbal dejaron de manifiesto la profundidad de las diferencias que separan a Moscú y Londres.