El Fondo Monetario Internacional (FMI) hizo un llamado a todos los países para no dar por terminada la guerra contra el covid-19 de forma prematura y abogó para que destinen los recursos que hagan falta para no perjudicar la recuperación económica, informó Efe.

“El mundo debe gastar los miles de millones que sean necesarios para contener el covid-19, con el objetivo de obtener billones como resultado” mediante el crecimiento económico, sostuvo la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, durante su intervención en el Foro de Davos virtual.

Administración

En esta mesa redonda, en la que también participó la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, y representantes de Brasil, Indonesia y Japón, Georgieva incidió en que la gestión de la pandemia continuará siendo la principal política económica del 2022.

Advirtió además que si no se garantiza un mayor nivel de protección frente al coronavirus en todo el planeta –en alusión a los bajos porcentajes de vacunación en los países más pobres– continuará “habiendo disrupciones y el futuro no será tan brillante” como podría ser.

La funcionaria citó el caso de China y su estrategia de tolerancia cero contra el covid-19, que incluye restricciones a la movilidad y confinamientos para atajar los rebrotes, y que se está traduciendo en una severa desaceleración que demuestra que la variante ómicron es “difícil de contener” sin que tenga un “impacto económico dramático”.

“Quizá fue un poco prematuro que China retirara sus políticas de estímulo, las debería haber mantenido durante algo más de tiempo”, ha señalado.

No obstante, recalcó que “las condiciones de cada país son muy diferentes, por lo que no pueden tener la misma política”, en contraste con la situación del 2020.

Inflación

En su discurso, Georgieva puso como ejemplo lo que ocurre en materia de inflación en dos “gigantes” como Estados Unidos y Japón, ya que mientras que en el primero la subida de precios subyacente –sin tener en cuenta la energía– ronda el 5.5%, el segundo cerró con una tasa cercana al 0%.

En este contexto, la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos avanzó una posible subida de los tipos de interés para controlar la elevada inflación, un retiro de los paquetes de estímulo que en opinión del FMI también tiene implicaciones en otros países con deuda en dólares, lo que puede enfriar su recuperación económica.

A su turno, Lagarde instó a ser “pacientes” a la hora de pedir subir los tipos en la eurozona porque todavía no se dan las condiciones para ello. “Los datos de demanda y empleo no van a la misma velocidad que en Estados Unidos y no parece que tendríamos la misma inflación”.

Salarios

La escalada de precios no se trasladó a los salarios, dijo Lagarde, quien confía en que, a pesar de la elevada incertidumbre, esta tendencia aleje una espiral alcista de la inflación.