Unidades de transporte deben tener sus certificados vigentes para garantizar su buen estado y evitar accidentes en las vías públicas.
Conducir un vehículo automotor implica mantenerlo en óptimas condiciones para evitar cualquier tipo de accidente en las pistas. Para ello, las unidades deben contar con un certificado de inspección técnica vehicular vigente, el cual garantiza que la máquina está en buen estado y segura para circular por las vías públicas.
Lo primero que debe hacer un conductor para empezar este proceso, es elegir un centro de inspección técnica vehicular (CITV) autorizado por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
En el siguiente enlace puede ubicar los establecimientos oficiales: https://rec.mtc.gob.pe/AutorizaEntiComplementarias/ArCITVConfiguracion
Luego, deberá acudir al local elegido con tu vehículo para que pase por la inspección, que comprende tres etapas: registro y verificación documentaria, inspección visual e inspección mecánica.
En la primera etapa, el personal del CITV solicitará la tarjeta de propiedad o tarjeta de identificación del vehículo, así como el certificado del SOAT vigente o del Certificado contra Accidentes de Tránsito (CAT). Asimismo, deberá presentar su certificado de inspección técnica vehicular anterior, a menos que sea la primera vez que pasa por este procedimiento.
Si el vehículo está habilitado para el servicio de transporte terrestre, te solicitará el certificado de habilitación vehicular o documento de formalización del vehículo, según la modalidad del servicio que presta. Y si cuentas con una unidad considerada vehículo especial, deberá presentar las autorizaciones o permisos especiales de circulación.
Estado del vehículo
La segunda etapa es la inspección visual. Los especialistas del centro de inspección revisarán el estado de conservación de la carrocería, espejos y parabrisas. Además, inspeccionarán la instalación de láminas retrorreflectivas, dispositivos antiempotramiento o parachoques.
Verificarán, además, la integridad estructural del chasis y vigas principales del vehículo, luego harán lo mismo con las ruedas, sistemas de dirección, suspensión, amortiguación y frenos.
En la etapa de inspección mecánica, constatarán el buen funcionamiento de los sistemas de luces, dirección, frenos y suspensión; además evaluarán los niveles de emisión sonora y de gases de la unidad.
Una vez aprobadas estas etapas de la inspección técnica, el centro otorgará el certificado de inspección técnica vehicular.
