Un terremoto de magnitud 7.2 sacudió ayer Haití, lo que causó al menos 304 muertos y derrumbes de edificaciones en este país caribeño que aún no se recupera del devastador sismo del 2010, y que padece una severa crisis política y social.

Puerto Príncipe, Haití

AFP

El sismo, que hizo temblar las casas y obligó a la población a buscar protección, se produjo hacia las 08:30 horas locales y tuvo su epicentro a unos 160 km de la capital haitiana, Puerto Príncipe, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).

El terremoto ha ocasionado al menos 304 muertes, “de las cuales 160 fueron registradas en el sur”, informó la agencia de Protección Civil del país caribeño. También hay “cientos de heridos y desaparecidos”, subrayó.

Christella Saint Hilaire, que vive cerca del epicentro, dijo que “muchas casas están destruidas” y que “las réplicas siguen produciéndose”.

“Las casas y los muros que las rodean se han derrumbado. El tejado de la catedral se derrumbó”, aseguró por su parte Job Joseph, residente de la ciudad de Jeremie, en el extremo occidental de Haití.

En el centro de esa ciudad, compuesta principalmente por residencias y edificios de una sola planta, se registraron graves daños.

Esfuerzos desesperados

Haití declaró el estado de emergencia en respuesta a la catástrofe.

Los habitantes compartieron imágenes en redes sociales que muestran los desesperados esfuerzos para sacar a gente de los escombros de los edificios derrumbados, mientras personas gritaban tratando de encontrar un lugar seguro fuera de sus casas.

“Estoy movilizando todos los recursos de mi administración para acudir en ayuda de las víctimas”, escribió en Twitter el primer ministro de Haití, Ariel Henry, al tiempo que llamaba a la unidad de la nación.

La larga sacudida inicial se sintió en gran parte del Caribe, incluso en Santiago de Cuba (a unos 300 km de Saint-Louis-du-Sud), donde muchos residentes salieron de sus hogares, según Radio Rebelde.

El USGS emitió inicialmente una alerta de tsunami, previendo posibles olas de hasta tres metros a lo largo de la costa de Haití, pero poco después la levantó.

Los daños en la ciudad de Les Cayes parecen ser importantes, incluyendo el derrumbe de un hotel de varios pisos.

Los residentes compartieron imágenes en las redes sociales de las ruinas de edificios de hormigón, incluida una iglesia en la que aparentemente se estaba celebrando una ceremonia en la ciudad suroccidental de Les Anglais.

Una tragedia tras otra

Un terremoto de magnitud 7 en enero del 2010 dejó gran parte de Puerto Príncipe y las ciudades cercanas en ruinas. Causó la muerte de más de 200,000 personas y dejó otras 300,000 heridas.

Más de un millón y medio de haitianos se quedaron sin hogar, dejando a las autoridades de la isla y a la comunidad humanitaria internacional ante un reto colosal en un país que carece de un registro de tierras y de códigos de construcción.

Cientos de miles de viviendas se destruyeron, al igual que edificios administrativos y escuelas, así como el 60% del sistema sanitario de Haití.

La reconstrucción del principal hospital del país sigue incompleta.

El terremoto de ayer se produce poco más de un mes después de que el presidente Jovenel Moise fuera asesinado en su casa por un comando armado, lo que conmocionó a un país que ya lucha contra la pobreza, una creciente violencia de las bandas criminales y la pandemia del covid-19.